"No se puede repetir una legislatura tan dura y ruda"

Esta frase enmarcaba el discurso por parte de Manuel Marín con motivo del 29º aniversario de la Constitución.

Si por algo se ha caracterizado Manuel Marín en su trayectoria política, es por sostener una actitud de diálogo, entendimiento y moderación; anteponiendo el interés de los españoles a las ideologías políticas. Sin duda, para nuestro presidente del Congreso ha primado el entendimiento, dejando a un lado los reproches y lo que es, si cabe, más importante: ha tenido claro que era algo que los ciudadanos íbamos a imponer y a reclamar.

El 15 de noviembre Manuel Marín anunció en Ciudad Real su retirada de la vida política, para dedicarse a la lucha contra el cambio climático.

No podíamos pasar por alto, la figura de un político como Manuel Marín: elegido diputado por la provincia de Ciudad Real en las elecciones de junio de 1977 fue el diputado más joven; repitió escaño en las dos legislaturas siguientes (1979 – 1982).

En diciembre de 1982 fue nombrado secretario de Estado de Relaciones con las Comunidades Europeas y durante tres años lideró el equipo encargado de las negociaciones para la adhesión de España a la CEE.

De 1986 a 1999 ejerció las funciones de vicepresidente de la Comisión Europea, asumiendo en funciones la presidencia de la CE entre julio y septiembre de 1999.

En el año 2000 regresa al Congreso, ejerció como portavoz en la Comisión de Asuntos Exteriores, fue vocal de la Comisión Mixta para la UE, vocal suplente en la Comisión Permanente y cabe destacar su intervención en los debates sobre la guerra de Iraq.

En el año 2004 fue elegido Presidente del Congreso, y en coherencia con el comunicado que hizo público al anunciarse su candidatura (en este comunicado se comprometía a garantizar los derechos de los partidos de la oposición y a impulsar la reforma del Reglamento de la Cámara, con el fin de crear un estatuto de imparcialidad para el presidente del Congreso) dejó su puesto en la Ejecutiva Federal del PSOE.

Esperamos y deseamos que su sucesor, al margen del partido político al que pertenezca, no tenga que “lidiar” una legislatura como esta y que sepa estar a la “altura” de las circunstancias. (Podrá ser complicado porque Manuel Marín ha dejado el listón muy alto).

Por último quiero pensar que no hemos perdido a un gran político y que Manuel Marín seguirá ejerciendo “la política con mayúsculas” desde otros ámbitos.

 

por “…si Ud. es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es lo importante”